Los atentados del 15 de septiembre en Morelia fueron un acto anunciado. Lo sorprendente es que no hubiese sucedido un acto terrorista similar con anterioridad. Ustedes recordarán que en este espacio no sólo hemos discutido la posibilidad de actos terroristas en México, pero de hecho les presenté en varias ocasiones, una entrevista con Robert Grenier, ex director de la Unidad Antiterrorista de la CIA. Grenier, nos comentó que “hay muchas razones para estar preocupados. Existen grandes organizaciones que tienen muchas capacidades y me parece que es solamente una cuestión de tiempo para que cambien sus tácticas, de que vayan de actividades criminales a algo que sea mucho más cercano a lo que se podría definir como terrorismo”.

El problema tal vez es que SI ha habido actos terroristas en México, pero que las autoridades y la misma sociedad civil no ha querido reconocer esta realidad. Hagamos un recuento de los diferentes actos de “violencia” en los últimos años que podrían tener connotaciones de atentados terroristas, pero que por diferentes razones fueron tratados como actividades criminales y no como lo que fueron: terrorismo. ¿Recuerdan como en 2006 explotaron petardos en la sede Nacional del PRI? ¿Y cómo entender los ataques a los ductos de Pemex con un impacto económico devastador? También ese año se encontró un carro con explosivos en el estacionamiento de la Torre Mayor en la Ciudad de México que requirió que se evacuara por completo lo que se considera el edificio más alto de Latinoamérica. ¿Y qué pasó con el bombazo que sucedió en la Avenida Chapultepec, también en el DF en febrero del 2008? Parecería que a todos se les olvidó lo que pasó en Sinaloa. Presuntos sicarios del narcotráfico se enfrentaron, en donde uno de los grupos hizo estallar un carro-bomba con tres recipientes con gas. En esta ocasión se encontraron un total de cuatro carros-bomba. En todos estos incidentes, o no murieron personas inocentes o los muertos y heridos estaban vinculados de una forma u otra al narcotráfico ( o por lo menos eso insinuaron las autoridades..). Todavía está por verse las razones por la reciente masacre en el estado de México. Y lo que sucedió recientemente en Sinaloa, es claramente una infamia: El asesinato de ocho personas (entre ellas tres niñas de entre 13 y 15 años) que esperaban la luz verde en sus carros. ¿Y qué tal la toma de rehenes en un restaurante por un grupo de sicarios después de que éstos asesinaron a un comandante. Veamos otra información que publicó EL UNIVERSAL que salió desapercibido. Según un reporte de la DEA, sicarios de los cárteles del Golfo y de Sinaloa son enviados a Irán, donde son capacitados en el manejo efectivo de armas y explosivos. Pero ahí no acaban las malas noticias. Estos grupos del crimen organizado han “contratado capacitadores iraníes para capacitar a sicarios en campos que tienen en la frontera de México con Estados Unidos”. Más allá que uno quiera creerle a la DEA o no, vale la pena hacerse otra pregunta: ¿Hay algún incentivo para que los sicarios de los cárteles no reciban entrenamiento y tecnología de otros grupos terroristas. Obviamente no. Ante los retos que enfrentan los Zetas, y los miembros de la Familia, era de esperarse que buscarían “know how” en otros lares y de otros expertos.

Haciendo un recuento de algunos de los actos de violencia en México me pregunto: ¿Por qué las autoridades seguían insistiendo que no había terrorismo en México? La repuesta es sencilla: sería reconocer que el país se les está saliendo de las manos. Y por razones políticas prefirió el gobierno tratar como “actos vandálicos” aquellas actividades llevadas acabo por grupos armados o con vínculos políticos, tal vez con la intención de poder negociar con estos más adelante.

Entonces la respuesta a la pregunta ¿por qué no había sucedido un atentado terrorista México? Es: ya había sucedido. Tal vez no le pusimos la atención adecuada. Y el gobierno no quiso reconocerlos como tal… El problema es ¿cómo va a diferenciar el gobierno entre actos vandálicos de grupos armados, de las actividades terroristas de los grupos de crimen organizado? Yo les pregunto estimados cibernautas: ¿será el número de muertos el metro con que se mida la diferencia entre actos criminales y actos terroristas? ¿En verdad piensa el gobierno que podrá mantener esta diferenciación? Espero sus comentarios…

Fuente: http://blogs.eluniversal.com.mx/weblogs_detalle5645.html