Defensores de los derechos humanos, ambientalistas y miembros de la comunidad judía protestaron en Río de Janeiro contra la participación del presidente de Irán, Mahmud Ahmedinejad, en la cumbre de Río+20 que se celebrará la próxima semana.
La multitud de varios centenares de personas recorrió calles del barrio turístico de Ipanema con banderas de Israel, pancartas y carteles con mensajes en los que se leía "Río no da la bienvenida a Mahmud Ahmedinejad" o "Negar el Holocausto es lo mismo que negar la esclavitud en Brasil".
Está previsto que Ahmedinejad llegue a Río de Janeiro a mediados de esta semana procedente de Bolivia donde el martes visitará a su colega y aliado boliviano, Evo Morales.
La concejal Teresa Bergher, integrante de la Comisión de Derechos Humanos de Río de Janeiro, explicó que la manifestación es un "grito contra la mentira y todo el mal que representa Ahmedinejad".
"No podemos permitir que este hombre venga a nuestra ciudad y por eso la próxima semana presentaremos una iniciativa para declarar persona no grata al presidente iraní", dijo Bergher.
En la protesta participaron también miembros de la comunidad homosexual que portaban la bandera del arco iris, así como ambientalistas contrarios al programa nuclear impulsado por el Gobierno iraní.
Algunos manifestantes subrayaron que la protesta es contra la participación de Ahmedinejad en la cumbre de la Río+20 que se celebrará entre los próximos miércoles y viernes y no contra el pueblo de Irán.
Agustín Ulaulobsky, director de la Comunidad Noam de Argentina, que vino a Brasil específicamente para participar en la protesta en representación de "toda la juventud judía argentina", declaró que Ahmedinejad "no es solo una amenaza local sino también mundial" y que "es importante luchar contra el fanatismo".
La semana pasada el Centro Simon Wiesenthal urgió a los gobernantes del mundo a "rechazar encuentros bilaterales" con Ahmedinejad, durante la Río+20 y a "abandonar el recinto" cuando tome la palabra.
"En el pasado, Ahmedinejad ha hecho abuso del podio de la ONU con el fin de negar el Holocausto nazi y promover una incitación al genocidio, a través de sus reiterados llamamientos para destruir a un país miembro de la comunidad internacional, el Estado de Israel", manifestó en un comunicado la organización judía de derechos humanos. EFE