La tercera caravana del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) busca que en EE.UU. se comprenda el "dolor insoportable" de la guerra contra las drogas en México y crear una "diplomacia ciudadana" para cambiar de estrategia, según dijo hoy a Efe el poeta Javier Sicilia.
Sicilia cruzó hoy la frontera entre Tijuana (México) y San Diego (EE.UU.) para dar inicio a la "Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad", que busca crear conciencia en Estados Unidos sobre la necesidad de terminar con la guerra contra las drogas a la que culpan de la muerte de cerca de 70.000 personas en México.
Víctimas mexicanas buscan dar a conocer en EE.UU. el costo humano de la lucha contra el narcotráfico a fin de "crear una diplomacia ciudadana que pueda poner fin a la guerra contra las drogas y revertir la militarización y represión en la que los dos países se han involucrado", explicó Sicilia a Efe.
"Solo cuando se regulen las drogas y se conciban como un problema social, económico y de salud será posible rescatar la perspectiva humana", agregó el poeta, convertido en un líder de la sociedad civil mexicana desde que su hijo Juan Francisco fue asesinado por narcotraficantes en marzo de 2011.
El propósito de la caravana, según Sicilia, es no solamente honrar a las víctimas, sino "hacer sus nombres y rostros visibles".
"Queremos que las personas en Estados Unidos comprendan el dolor insoportable y las pérdidas causadas por estas muertes, y la enorme responsabilidad compartida de proteger a comunidades y familias en ambos países", subrayó.
Sicilia estuvo acompañado por otras víctimas de la violencia en México en un evento en el Parque de la Amistad de San Diego, localizado junto al muro fronterizo.
La caravana partirá con destino a Washington, donde planean llegar el 12 de septiembre luego de visitar cerca de 20 ciudades en todo el país.
Entre las ciudades que visitarán se encuentran Los Ángeles, Phoenix, Tucson, Las Cruces, Albuquerque, Santa Fe, El Paso, Laredo, Brownsville, San Antonio, Austin, Houston, Dallas, Birmingham, Charlotte, Chicago, Nueva York y Baltimore.
En el evento en el Parque de la Amistad, Sicilia expresó su esperanza en que los ciudadanos sean capaces de restaurar el sueño democrático de poner en el centro de la cosa pública la dignidad de la vida por encima de la seguridad, los asesinatos o los problemas de dependencia que causan las drogas.
Enrique Morones, del grupo Ángeles de la Frontera y que coordinó la caravana en San Diego, dijo a Efe que "los derechos humanos, como la paz, no tienen fronteras.
"Familias en ambos países están afectadas por la interrelación entre ambas naciones. Por eso la marcha tiene cinco elementos principales, como la exploración de alternativas a la prohibición (de las drogas), parar el tráfico ilegal de armas de EE.UU. a México y el combate al lavado de dinero", afirmó.
Morones también abogó por "la suspensión inmediata de la ayuda militar de Estados Unidos a las Fuerzas Armadas de México, que lleva a violaciones de derechos humanos, y frenar la militarización de la frontera".
Esta caravana por la paz que recorrerá EE.UU. es la tercera organizada por el movimiento de Sicilia después de otras dos hechas en México.
Entre las cerca de 100 organizaciones estadounidenses que participan en la caravana se encuentran la Alianza Nacional de Comunidades Latinoamericanas y del Caribe (NALACC), la Asociación Nacional para el Avance del la Gente de Color (NAACP), el Congreso Nacional Latino y Estudiantes por una Sensible Política Contra las Drogas.
Mientras, del lado mexicano figuran Alianza Cívica, Sin Fronteras, Fuerzas Unidas por los Desaparecidos en México y la Asociación Popular de Familiares de Migrantes.