Los fotógrafos Mircea Topoleanu y Brandon Daniel Bazán fueron puestos en libertad el pasado domingo, tras haber pasado ocho días detenidos. Ambos fueron arrestados el 1 de diciembre de 2012, día de la investidura de Enrique Peña Nieto como presidente, jornada que estuvo marcada por numerosos enfrentamientos entre los manifestantes y la policía. Al igual que las otras 54 personas que fueron liberadas junto con ellos (de un total de 69), los dos periodistas fueron exonerados del delito de “alteración de la paz pública”, por el que se habrían enfrentado a una pena de entre 5 y 30 años de prisión.
“Evidentemente celebramos este epílogo judicial, que atañe a la mayoría de las personas detenidas el 1 de diciembre. No obstante, el que se haya puesto en libertad a los fotógrafos no permite olvidar una jornada de investidura presidencial manchada por una muy fuerte represión policíaca que atentó contra el derecho a manifestarse y, en ocasiones, de informar. Estos acontecimientos deben esclarecerse por completo, en particular los casos de tortura registrados por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal”, declaró Reporteros sin Fronteras.
Mircea Topoleanu, de 32 años de edad, es colaborador de la revista Voices Mexico. El fotógrafo de nacionalidad rumana presenciaba el violento arresto de un joven manifestante, efectuado por agentes de policía, cuando estos lo agredieron por sorpresa; le golpearon y le despojaron de su equipo profesional. Después lo trasladaron a la agencia número 50 del Ministerio Público, donde no le permitieron contactar con un abogado particular ni con la embajada de su país. El 3 de diciembre lo trasladaron al Reclusorio Norte.
Brandon Daniel Bazán, de 19 años de edad, fotógrafo de la revista Café MX, quien se encontraba detenido en el mismo lugar, fue arrestado junto.