La restauración del orden constitucional en Honduras debe ser acompañada de la revocación inmediata de decretos y medidas represivas del gobierno de facto, y de una investigación completa de los abusos cometidos luego del golpe de estado, dijo Human Rights Watch hoy.
El gobierno de facto de Honduras y el presidente depuesto, Manuel Zelaya, anunciaron hoy que habían llegado a un acuerdo la noche del 29 de octubre de 2009 para restituir a Zelaya al poder. El contenido exacto del acuerdo aun no se ha dado a conocer.
"Honduras debe corregir urgentemente los graves retrocesos en materia de derechos humanos ocurridos desde el golpe", dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. "Honduras debe dar marcha atrás con la legislación represiva y dar órdenes inequívocas a las fuerzas de seguridad para que dejen de cometer abusos y cooperen con las investigaciones de la unidad de derechos humanos de la Fiscalía".
Fuente: Human Rights Watch