Bogotá.- El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, desautorizó el martes cualquier discurso de agresión internacional frente a Venezuela, en momentos en que las relaciones de los dos países atraviesan la peor crisis diplomática en la historia reciente.
Las declaraciones se produjeron un día después de que su homólogo venezolano, Hugo Chávez, presidió un desfile militar en una zona de frontera en el que reiteró su denuncia que desde Colombia y con el apoyo de Estados Unidos se prepara una agresión a su país.
También se conocieron luego de que un informe del Ministerio de Defensa de Colombia aseguró que el país requiere comprar material bélico disuasivo que le permita defender su soberanía ante amenazas expansionistas y territoriales de sus vecinos, reseñó Reuters.
"Nuestro mensaje de toda hora tiene que ser un mensaje de afecto al hermano pueblo de Venezuela. El presidente de la República desautoriza cualquier mención que signifique ánimo retaliatorio, ánimo de guerra internacional, este país no lo permite", dijo Uribe en declaraciones a la Radio Nacional.
"Nosotros el único objetivo que tenemos es derrotar un problema interno de terrorismo", explicó el mandatario.
Aunque Uribe y sus funcionarios han guardado un discurso prudente en medio de la crisis con Venezuela, recientemente el ministro de Defensa, Gabriel Silva, respondió irónicamente a una denuncia de Chávez sobre un sobrevuelo de un avión espía.
Silva aseguró que los soldados venezolanos habían confundido el trineo de Papá Noel con un avión espía.
"Yo no autorizo, y lo digo muy claramente, mientras yo sea presidente el país no puede tener, no puede tener una estrategia, un discurso de agresión internacional", advirtió Uribe.
La crisis diplomática surgió en julio por la decisión de Uribe de firmar un acuerdo militar con Estados Unidos que permite a soldados de ese país usar siete bases en suelo colombiano para realizar operaciones contra el narcotráfico y el terrorismo.
Chávez, el más fuerte crítico de Washington en la región, denunció la supuesta intención de Estados Unidos de instalar una plataforma desde Colombia para invadir su país.
La actual disputa diplomática de Bogotá y Caracas es considerada como la peor desde 1987 cuando los dos países, que comparten una frontera terrestre de 2.219 kilómetros, estuvieron al borde de una guerra después de que un barco de guerra de Colombia fue interceptado por la Armada de Venezuela en una zona marítima bajo disputa limítrofe.
Durante la actual crisis diplomática, que ha afectado el comercio binacional, se han registrado asesinatos de colombianos en territorio venezolano, acusaciones de espionaje, detenciones de efectivos de las fuerzas de seguridad de los dos países y la destrucción de puentes en la frontera.
Pese a la tensión Chávez negó el lunes que con el moderno armamento comprado recientemente a Rusia esté preparando una guerra con Colombia como lo temen algunos analistas.
Fuente: ElUniversal.com