Sábado, 26 de julio de 2008. Miami, Florida.- Con la excusa de defender a Venezuela de una posible invasión de los Estados Unidos, luego de la reactivación de la Cuarta Flota americana en el Caribe, Hugo Chávez salió de compras a Europa, con la chequera petrolera.

En su periplo por Europa, Chávez se detuvo en Rusia, y se colocó de rodillas ante los ex-soviéticos, auto proclamándose lacayo de Putin y su gobierno, en añoranza al otrora ejército rojo ruso y la fracasada e inexistente Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (U.R.S.S.), modelo sobre el cual el tirano venezolano desea crear una Unión de Repúblicas Socialistas Bolivarianas (U.R.S.B.), denominada por el déspota como "La Patria Grande".

Pero Chávez se ha encontrado con una piedra en el zapato: Colombia, país que le está dando golpes mortales a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia FARC, organización terrorista apoyada desde la República de Cuba, a partir de 1959, y posteriormente financiada y apoyada desde 1999 por la República de Venezuela.

Colombia es un fuerte aliado de los Estados Unidos en su lucha contra el terrorismo, y actualmente se encuentra enfrentada por una conspiración financiada desde Caracas, inspirada desde La Havana, y con tentáculos en sectores denominados por los propios comunistas como "progresistas", tanto en el Congreso de los Estados Unidos como en otras esferas del gobierno americano, lo cual ha impedido la concretización del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, y ha puesto en peligro la continuidad del "Plan Colombia", programa mediante el cual los EE.UU. ofrece ayuda financiera, militar y logística para combatir el narcotráfico, el terrorismo, y para apoyar programas sociales destinados a la reiserción de guerrilleros desmovilizados.

En este viaje, con escalas en Bielorrusia, Portugal y España, Chávez ha montado un circo armamentista gracias a los petrodólares venezolanos, para hacer lo que mejor sabe: Amenazar con el uso de la violencia a Colombia y a quienes lo oponen en América Latina, en su afán de instaurar su proyecto de expansión comunista en la región.