El contraalmirante retirado Carlos Molina Tamayo, ex asesor de Seguridad Nacional de Hugo Chávez, fue testigo de algunos de los primeros intentos del gobierno venezolano por suministrar clandestinamente armas a la guerrilla colombiana, según una entrevista publicada hoy por el diario El Nuevo Herald.
Molina, quien vive exiliado en Europa tras su participación en el fallido golpe del 2002, explicó que en una ocasión un cercano colaborador de Chávez, el capitán de navío retirado Ramón Rodríguez Chacín, le pidió que le entregara fusiles para los rebeldes cuando él estaba a cargo del arsenal de las Fuerzas Armadas, reseñó Efe.
"Rodríguez Chacín me pidió 300 fusiles FAL. Me dijo sólo que era para una operación irregular pero se entendía que era para una operación de la guerrilla. Me preguntó que de dónde se podía sacarlos sin dejar rastros", dijo Molina, de visita en Miami.
Según el Nuevo Herald, Rodríguez Chacín, dos veces ministro de Relaciones Interiores de Chávez y quien fue incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por ayudar materialmente a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el tráfico de drogas, no volvió a pedir ayuda a Molina Tamayo.
Poco después, la dirección de Armamento de las Fuerza Armada Nacional, presidida por Molina, detectó casos de pérdida de material bélico y las investigaciones consiguientes determinaron que hubo complicidad o participación directa de integrantes del Ejército.
"A veces había operaciones donde se robaban armas, o se fingía que se las estaban robando, para entregárselas a la guerrilla. No se trataba solamente de fusiles, también desaparecían morteros, granadas y los cohetes anti-tanques AT4, esos que han aparecido en manos de la guerrilla", dijo Molina a El Nuevo Herald.
Pese a su negativa a colaborar con las gestiones de Rodríguez Chacín, Molina fue posteriormente nombrado secretario permanente del Consejo de Seguridad y Defensa de Venezuela.
Pero duró muy poco tiempo en la posición ministerial debido a los constantes enfrentamientos y desacuerdos que sostuvo con el presidente Hugo Chávez, quien le nombró embajador en Grecia.
En Grecia, Molina presentó su renuncia y solicitó la del presidente Hugo Chávez por sus estrechos vínculos con los movimientos armados de Colombia, entre otros motivos.
Fuente: ElUniversal.com