Las FARC anunciaron que tienen secuestrado, como "prisionero de guerra", al periodista francés Roméo Langlois, según un breve comunicado al que se han referido medios colombianos y que fue transmitido en una llamada telefónica.
Una mujer que dijo hablar en nombre de los insurgentes transmitió el comunicado mediante una llamada a uno de los periodistas colombianos que viajaron al sitio de los hechos, precisó la cadena bogotana Caracol Radio.
Langlois fue declarado desaparecido hace tres días, en medio de combates de las fuerzas de seguridad con insurgentes en el departamento del Caquetá, en el sur de Colombia, en los que hubo varios muertos.
"Tenemos al periodista francés en nuestro poder", dijo la mujer, según refirió un corresponsal de Caracol Radio que está en La Unión Peneya, la aldea en la que se vio por última vez a Langlois, aunque por ahora no se ha confirmado cuál de los periodistas colombianos atendió directamente la llamada y a qué medio pertenece.
"Lo hemos declarado prisionero de guerra", agregó la presunta rebelde, según el mismo periodista de la cadena radial, quien apuntó que los insurgentes explicaron tal decisión en el hecho de que Langlois llevaba un casco y un chaleco de uso militar.
La mujer confirmó que el periodista francés está herido en el hombro izquierdo y dijo que ha recibido atención médica por parte de los insurgentes.
Al parecer, la presunta guerrillera dijo pertenecer al "frente quince" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), reducto que el sábado pasado se enfrentó a un contingente militar y policial en La Unión Peneya, aldea de Montañita, población del departamento del Caquetá.
Tres militares y un policía murieron en los combates, que estallaron cuando las tropas avanzaban en desarrollo de una operación antidrogas, acompañadas por Langlois.
El periodista francés es corresponsal en Colombia del canal France 24 y el diario Le Figaro.
El lunes, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, declaró que el Gobierno tenía "indicios claros" de que Langlois estaba en manos de las FARC, a las que le exigió que lo pusieran en libertad.