Fue sencilla y al mismo tiempo potente la Ceremonia Interreligiosa de Oración por la Paz para Palestina e Israel el miércoles 4 de febrero convocada por el Círculo de Hacedores de Paz de México. Amantes de la Paz de diferentes generaciones inundaron con su presencia los salones del Instituto Luz sobre Luz. Presencias visibles e invisibles, acudieron a apoyar el conmovedor encuentro por la paz.
Siete tradiciones sagradas estuvieron presentes. Las tradiciones de los Concheros, el Sikhismo, el Budismo, el Catolicismo, Iglesia Unity, el Judaismo y el Islam esparcieron la luz y el poder de sus oraciones con la mayor dignidad y de manera amorosa a través de sus representantes. En los silencios entre los rezos y cantos de las diversas tradiciones sagradas, se hacía perceptible, como lo hizo notar Nadira como presentadora, la presencia de Dios en las almas. Nuestros corazones fueron elevados oración tras oración, intención tras intención. La dulzura que mana de la savia del tronco del árbol de la unicidad divina, acarició nuestros cuerpos, nuestras mentes, nuestros corazones.
Todos extrañamos a Málika. No se sentía bien de salud, pero los frutos de su servicio por la paz hoy, inshallâh, florezcan en su corazón. El ágape nos dio la oportunidad a todos de honrar a la Hermana Delia Canales en la celebración de su octogésimo sexto año de una vida admirable llena de dedicación hacia el trabajo interreligioso y ecuménico. Pudimos juntos orar por su salud y su bienestar. De ella brotó el torrente de gratitud que le ha dejado su largo y luminoso camino.
Al final, la tradición del Judaísmo y el Islam se unieron para orar juntas. Elías Shabot cantó en hebreo inspirados y jubilosos cantos de paz. El imám Abd'l Málik recitó versos del Sura de la Misericordia del sagrado Qur'an. Leyla y Dujha recitaron los más hermosos Nombres Divinos (Asma al Husna) con una armonía que sólo el amor es capaz de entregar.
Esta es la primera vez que dos recién nacidos - Iásin, de 1 año y Aziz, de 9 meses- asisten a una Ceremonia de Oración del Círculo de Hacedores de Paz en el Instituto Luz sobre Luz. La generación anterior también estuvo representada por Iá Sin, de 10 años y Rumi, de 8. Quizá su presencia esta noche es un signo de que a ellos, cuando sean mayores, les tocará vivir la realidad que esta noche imaginamos juntos tras escuchar el soplo del caracol.
Con gratitud,
Amina al Yerráhi
Fuente: http://www.webislam.com/?idn=13986