TEHERÁN Y MARACAY. Los países de la Alianza Bolivariana para las Américas (Alba) que estuvieron reunidos en la ciudad venezolana de Maracay respaldaron al presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, y rechazaron lo que consideran "injerencia externa" en ese país.

En la declaración final de su sexta cumbre, los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez ; de Bolivia, Evo Morales; de Nicaragua Daniel Ortega, y del Ecuador, Rafael Correa, condenaron la "campaña de desprestigio desatada contra ese hermano país", después de que los resultados de las elecciones del pasado 12 de junio ha sido objetados por la oposición.

Los mandatarios aliados "ratificaron su respaldo a la Revolución Islámica de Irán, a las instituciones de la República Islámica de Irán y al Gobierno del presidente Mahmud Ahmadinejad. Rechazaron la injerencia externa y la campaña de desprestigio desatada contra ese hermano país", indica el texto.

Chávez señaló, además: "Empiezan a salir encuestas a última hora. Dicen que hay un empate y después denuncian fraude. La gente a la calle, unos muertos, tienen francotiradores, y detrás está la CIA".

Y añadió: "No les extrañe que eso se esté preparando para las próximas elecciones aquí, en Venezuela, o en cualquiera de nuestros países".

Ahmadinejad apunta a la UE y a Obama.

Luego de "aplastar" las protestas callejeras de los partidarios del candidato reformista Mir Husein Musaví con el uso excesivo de la fuerza, el Gobierno del presidente Ahmadinejad enfiló sus ataques contra la Unión Europea (UE) y el presidente de los EEUU, Barack Obama.

Ahmadinejad exigió ayer a su par estadounidense que deje de interferir en los asuntos internos de la República Islámica. "Espero que usted (Obama) evite interferir en los asuntos iraníes y exprese arrepentimiento, de tal forma que nuestro pueblo sea informado de ello", dijo el ultraconservador.

El líder iraní afirmó que cada vez que escucha hablar al mandatario de los EEUU, recuerda a su predecesor George W. Bush, y que esto hacía peligrar la posibilidad de cualquier diálogo. "¿Va a utilizar este lenguaje con Irán? Si ese es el caso, no habrá nada que hablar", añadió.

El miércoles pasado, el ministro iraní de Interior, Sadegh Masuli, acusó a los "agitadores" de las protestas de haber recibido dinero de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos.

La exigencia se extendió hacia todos los países de Occidente, especialmente a los europeos, a quienes advirtió que las relaciones han cambiado luego de su victoria electoral. "Los occidentales pensaban que podían destruir la autoridad del pueblo iraní con propaganda falsa. Deben saber que, a partir de ahora, Irán hablara desde otra posición, tratará a los enemigos desde una nueva perspectiva", sentenció Ahmadinejad.

Por su parte, el embajador de Irán en Bruselas (Bélgica), Alí Asghar Jaji, reclamó a la UE que no "interfiera en los asuntos" de su país y alertó contra "medidas precipitadas" que podrían tener "consecuencias inconvenientes".

El reclamo de Asghar Jaji fue realizado durante un encuentro con el presidente del Parlamento Europeo, Hans-Gert Poettering.

Mientras tanto, Musavi, principal figura del movimiento que pide la anulación de las elecciones presidenciales, desafió nuevamente al poder al afirmar que no se dejará amilanar por las "amenazas", y renovó su llamamiento a seguir las manifestaciones en calma.

Sin embargo, su llamado no tuvo eco, ya que el clérigo reformista Mehdi Karrubí, que ocupó el tercer lugar en las elecciones, suspendió una ceremonia que pretendía celebrar ayer, en recuerdo de las personas muertas en los últimos 13 días de protestas, por temor a que la milicia islámica Basij, cercana a Ahmadinejad, los atacara; además, porque el Ministerio del Interior mantiene la prohibición de realizar reuniones masivas.

Asimismo, la oposición denunció que al menos 70 profesores universitarios fueron detenidos por las autoridades iraníes tras reunirse en Teherán con Musaví. Esto fue desmentido por la Policía iraní, la que acusó a la oposición de inventar detenciones para desprestigiarlos.

Además, trascendió que durante las protestas unos ocho miembros Basij murieron en manos opositoras. (EFE-AFP)

Culpan a BBC de muerteLa prensa ultraconservadora iraní intentó justificar a las fuerzas de seguridad tras la muerte de Neda, la joven cuyas imágenes de su agonía inundaron Internet, acusando incluso a un periodista de la BBC de haber contratado un sicario para asesinarla. La muerte de Neda Agha Soltan en Teherán causó conmoción e indignación mundial. La joven se convirtió en símbolo de la ola de protestas que afectan a Irán desde la reelección del Ahmadinejad. Su novio, Caspian Makan, afirmó que Neda no había participado en las manifestaciones y que solo pasaba por una de ellas cuando recibió una bala disparada por un miliciano.

Gran ayatolá advierte

El gran ayatolá iraní disidente Hosein Alí Montazeri advirtió que si se siguen reprimiendo las manifestaciones pacíficas en Irán, se puede provocar la caída del Gobierno de Ahmadinejad. "Si el pueblo iraní no puede revindicar sus derechos legítimos en manifestaciones pacíficas y es reprimido, el aumento de la frustración puede destruir los cimientos de cualquier Gobierno, por fuerte que sea". Montazeri, cuyo rango es el más elevado en el clero chiita iraní, llamó también a los conciudadanos que refuten la legitimidad de los resultados del proceso electoral a seguir adelante con el movimiento de protesta.

Fuente: http://www.hoy.com.ec/noticias-ecuador/la-alba-apoya-a-ahmadinejad-355078.html